Todos hemos oído hablar de los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), seguro que muchos de nosotros conocemos a alguien que haya padecido alguna de sus categorías. Entre este tipo de trastornos los reconocidos por las clasificaciones oficiales se encuentran: Anorexia nerviosa, Bulimia Nerviosa, Trastorno por Atracón y Trastornos de Conducta Alimentaria no especificados que cumplen con todos los criterios para ser considerado un Trastorno de la Conducta Alimentaria Específico.
Pues bien, dentro de este último grupo podríamos incluir la Diabulimia, muchos os preguntaréis ¿Qué es la Diabulimina, en qué consiste…? Lo primero aclarar que este tipo de Trastorno de la Conducta Alimentaria sólo se puede producir en los pacientes con diabetes tipo 1; es decir es el fruto de la combinación de un Trastorno de la Conducta Alimentaria y la Diabetes tipo 1 (insulinodependiente), cuestiones ambas que ya por separado son lo suficientemente peligrosas (en el caso de la diabetes sólo si está mal controlada), pues imaginemos como puede ser la combinación de ambas.
Como decíamos este TCA sólo puede darse entre personas insulinodependientes, quienes con el objeto de adelgazar (de forma absolutamente insalubre y peligrosa, queremos dejar esto bien claro) reducen o incluso omiten las dosis de insulina que les corresponde según su tratamiento para mantener un correcto control glucémico; lo que puede conllevar consecuencias irreparables en la salud del paciente con diabetes.
Muchas veces el detonante de este trastorno se da con el debut en la diabetes, pues en ese momento en el que nuestro cuerpo comienza a avisarnos de que algo está fallando en nuestro sistema, bajamos muchísimo de peso (muchos lo recordaréis en vuestro debut que sin saber cómo estabais todo el día bebiendo agua, orinando, comiendo un montón y aun así adelgazando muchísimo), pero esto es una consecuencia directa de que nuestro páncreas no esté produciendo insulina, de forma que no se pueden trasladar los nutrientes que necesitamos hasta las células, y se eliminan por la orina (de ahí ese incremento de las micciones y la necesidad de beber agua antes del debut).
Una vez que se diagnostica la Diabetes tipo 1 insulinodependiente, y se establece el tratamiento con insulina, volvemos a recuperar ese peso que hemos perdido por una contingencia anormal; y eso es lo que puede ser el detonante de un TCA en aquéllas personas que por cualquier razón puedan ser propensas a sufrir este tipo de trastornos.
El TCA también puede ser un antecedente al diagnóstico de la diabetes, y con el debut ese Trastorno adopta la forma de Diabulimia, porque los pacientes descubren que hay otra forma de adelgazar.